Los brazos de un sofá suelen ser uno de los primeros lugares que se desgastan, pero con un poco de ingenio y algunos materiales nuevos, puedes tapizarlos fácilmente y dar una nueva vida a tus muebles. En este artículo, te mostraremos cómo hacerlo. Sigue leyendo para conocer todos los detalles.

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1. Retira el viejo tapizado de los brazos del sofá

El primer paso es retirar el viejo tapizado del brazo del sofá. Tendrás que utilizar un destornillador para quitar los tornillos que sujetan el tapizado. Una vez que hayas quitado los tornillos, puedes retirar con cuidado la tapicería del brazo del sofá. Si tienes cuidado, puedes reutilizar el tapizado, pero si está dañado, tendrás que sustituirlo.

El primer paso es retirar el viejo tapizado del brazo del sofá.

2. Aspira o cepilla la suciedad o los restos

Actualizar la tapicería de tu sofá es una forma estupenda de darle un nuevo aspecto, y no es tan difícil como crees. El primer paso es quitar la tela vieja como ya explicamos. Puedes hacerlo despegándola o cortándola con un cuchillo afilado.

Una vez retirada la tela vieja, tendrás que preparar la superficie del brazo antes de empezar a tapizarlo. Esto significa aspirar o cepillar la suciedad o los restos que puedan estar adheridos al brazo. Una vez que el brazo esté limpio y seco, puedes empezar a medir y cortar la nueva tela.

3. Corta la tela nueva a la medida y colócala sobre el brazo

Una vez que la superficie esté limpia, tendrás que medir la tela. Corta la tela a la medida, dejando unos centímetros de exceso en todos los lados. A continuación, aplica una capa de adhesivo en el reverso de la tela. Empezando por un extremo, alisa la tela sobre el brazo del sofá, y vete trabajando hasta cubrirlo por completo.

Corta la tela nueva a la medida y colócala sobre el brazo

4. Grapa la tela en su sitio

Tapizar el brazo de un sofá es un proceso sencillo que cualquiera puede hacer con un poco de tiempo y esfuerzo. El primer paso es retirar la tela vieja, que suele estar sujeta con grapas.

Una vez retirada la tela vieja, tendrás que medir el nuevo trozo de tela y cortarlo a la medida. Luego, coloca la tela de forma que quede centrada en el brazo y empieza a graparla en su sitio. Empieza en el centro de un lado y ve avanzando hacia las esquinas.

Asegúrate de tirar de la tela para evitar que se arrugue. Cuando hayas terminado los cuatro lados, puedes recortar el exceso de tela y disfrutar de tu brazo de sofá recién tapizado

5. Recorta el exceso de tela

La fabricación de un mueble como un sofá requiere una gran cantidad de trabajo artesanal. La estructura de madera debe cortarse con precisión y los muelles deben enrollarse a la perfección.

Luego está la tela, que debe cortarse y coserse con mucho cuidado. Por eso siempre es mejor dejar el trabajo de tapicería a los profesionales. Por ello, el penúltimo paso es recortar el exceso de tela y de relleno, ¡y ya está! Con un poco de paciencia y atención a los detalles, puedes dar a tu sofá un aspecto totalmente nuevo.

Recorta el exceso de tela

6. Cubre el sofá para tapar los brazos recién tapizados

Después de seguir los cinco primeros pasos sobre cómo tapizar el brazo de un sofá, el siguiente paso es cubrir el sofá para proteger el brazo recién tapizado. Esto puede hacerse de varias maneras, pero una de las más sencillas es utilizar un trozo de tela. Basta con medir la longitud y la anchura del brazo, y cortar un trozo de tela un poco más grande.

Luego, coloca la tela sobre el brazo y fíjala con alfileres o cinta adhesiva. Esto proporcionará una barrera entre el brazo y el resto del sofá, evitando que la suciedad y los residuos lleguen a la tela limpia. Además, también protegerá el brazo de cualquier desgaste que pueda producirse con el tiempo. Con este sencillo paso, puedes asegurarte de que tu tapicería dure muchos años.

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